La prevención de incendios comienza con estar preparados/as, y esto incluye el mantenimiento regular de tus extintores. ¿Están los tuyos en condiciones óptimas?
En Pimexa, te enseñamos cómo mantenerlos en perfecto estado de funcionamiento.
7 pasos para asegurarte de que tus extintores estén en perfecto estado
1. Revisión visual mensual
Lo primero que debes hacer es realizar una revisión visual mensual. Esta tarea es simple pero crucial. Asegúrate de que el extintor esté en su lugar designado, fácilmente accesible y visible.
Verifica que no haya obstrucciones que puedan impedir su uso rápido. Comprueba también que los sellos y pasadores de seguridad estén intactos y que no haya signos de daños físicos, corrosión o fugas.
2. Comprobación de la presión
Los extintores de incendios vienen equipados con un manómetro que indica si la presión interna está en el rango adecuado. Debes verificar que la aguja del manómetro esté en la zona verde. Si está en la zona roja, puede significar que el extintor ha perdido presión y podría no funcionar correctamente en una emergencia. En ese caso, es necesario recargarlo o repararlo inmediatamente.
3. Inspección de la boquilla y la manguera
Revisa que la boquilla y la manguera del extintor no estén bloqueadas, agrietadas o dañadas. Si encuentras alguna obstrucción, asegúrate de limpiarla. En caso de encontrar daños mayores, reemplaza la manguera o la boquilla para asegurarte de que el extintor funcione correctamente.
4. Comprobación de la fecha de vencimiento
Todos los extintores tienen una vida útil y una fecha de vencimiento. Es fundamental revisar la etiqueta del fabricante para conocer la fecha de vencimiento y programar las recargas y revisiones profesionales necesarias. Generalmente, los extintores deben recargarse cada 5 años, pero esto puede variar según el tipo de extintor y las recomendaciones del fabricante.
5. Realiza pruebas hidrostáticas
Las pruebas hidrostáticas son una forma de asegurarse de que el extintor pueda soportar la presión interna sin fallar. Estas pruebas deben ser realizadas por profesionales certificados y suelen ser necesarias cada 5 o 12 años, dependiendo del tipo de extintor.
Consultar el manual del fabricante te proporcionará información específica sobre cuándo y cómo deben realizarse estas pruebas.
6. Registro del mantenimiento
Llevar un registro detallado del mantenimiento es una práctica esencial. Documenta todas las inspecciones visuales, comprobaciones de presión, reemplazos de piezas y pruebas hidrostáticas.
Esto no solo te ayudará a recordar cuándo se debe realizar el próximo mantenimiento, sino que también proporcionará un historial completo que puede ser útil en caso de auditorías de seguridad o investigaciones de incidentes.
7. Formación y conocimiento
Finalmente, aunque no es directamente una tarea de mantenimiento, es vital que tú y todos/as los/las miembros de tu equipo sepan cómo usar correctamente un extintor. Una rápida capacitación sobre cómo manejar un extintor puede marcar la diferencia en una situación de emergencia.
Asegúrate de que todos entiendan el método PASS (pull, aim, squeeze, sweep) que en español sería (tirar, apuntar, apretar, barrer).
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